Lima siglo XIX

Nuestra ciudad no fue afectada a pesar de las modificaciones que hubo en la colonia. Las casas aún seguían siendo de adobe y contaban con dos pisos. Asimismo, las más importantes tenían balcones de madera, y un establo para los caballos y las mulas. Las calles con mayor importancia eran las que desembocaban a la Plaza de Armas.

En 1834, se firmó un contrato para mejorar las viviendas con respecto al agua: Cambiar las cañerías de barro por las de fierro colado. Esto se dio desde la caja de Santo Tomás hasta la pila de la plaza de la Plaza de Armas.

En 1855, se comenzó a formar una ciudad moderna con grandes cambios. Uno de ellos fueron las primeras construcciones con granito, alumbrado público a gas (para esta época, Lima contó con 500 luces de gas).

Al año siguiente se comenzó a gozar del agua potable, e incluso, se instalaron las cañerías de fierro en los hogares de la ciudad. También, se inauguró el ferrocarril Lima-Callao, el cual fue el primero en América del Sur. Por otro lado, se facilitaron las normas para la inmigración extranjera, los esfuerzos a favor de la industria nacional (utilizando máquinas a vapor), los ingresos de la venta del guano, la aparición de primeras financieras y bancos, etc.

En 1858 se instituyen normas para que prevaleciesen la paz, el orden, el aseo en la ciudad y la reglamentación de los carruajes, los cuales debían poseer ruedas y ejes de determinadas dimensiones, solo podían transitar con cierto número de pasajeros, etc.

1866 fue el año en el que entró en vigencia el Reglamento de la Policía Municipal, el cual estableció reglas acerca de la arquitectura, salubridad pública, comodidad y aseo, aguas, mercados, artesanos, sirvientes, jornaleros, funerales, toques de campana, policías de campo, etc. Estas fueron el motivo de quejas y rebeliones y muchos eran encarcelados, por eso, solo podían ser liberados si el Arzobispo lo solicitaba.

En la segunda etapa de Lima, era obvio que ya estaba modernizada; sin embargo, hubo evidentes retrocesos, como los descontroles de las rebeliones (destacando la rebelión de los hermanos Gutiérrez).

Alrededor de 1870, se veía lejos el ambiente de la pobreza. La ciudad sufrió grandes transformaciones:

-Se empezó la construcción de las urbanizaciones de las zonas ubicadas entre Lima, Callao y Chorrillos.
-Construcción de la carretera Lima-Callao.
-La inauguración del puente nuevo sobre el Rímac.
-Construcción del barrio de La Victoria.
-La instalación de las cañerías de fierro para canalizar el desagüe de la ciudad.

Estos cambios fueron motivo de nostalgia hacia la Lima Colonial.